lunes, 20 de noviembre de 2023

EL TUPANDAPTYLUS NAVIGANS EL EXTRAÑO DINOSAURIO RECUPERADO EN UNA REDADA POLICIAL EN EL BRASIL.

 Escondidas en barriles y cargadas en camiones, miles de  piezas de caliza se sacaron de contrabando de Brasil en 2013. Extraídas de una cantera de la famosa región paleontológica de Araripe, no eran rocas normales. Tenían guardadas durante milenios restos impecablemente conservados de criaturas que vivieron hace millones de años.

Destinados a la venta a museos y potencialmente coleccionistas privados de todo el mundo, el tesoro fósil habría aportado a los contrabandistas miles de euros, sino más. Sin embargo, las redadas policiales que se hicieron en el ámbito de una investigación llamada Operación Múnich, interceptaron la exportación ilegal y enviaron los casi 3000 ejemplares recuperados a la Universidad de São Paulo.

Entre las reliquias había un extraño reptil alado, de casi 1,2 metros de alto, una mandíbula similar al pico de los pájaros y tocado enorme. Ahora los científicos informan que es el primer esqueleto casi completo de la especie de pterosaurio Tupandactylus navigans, que vivió durante el periodo Cretáceo, hace unos 110 millones de años.




El Tupandactylus navigans ,  es miembro de un grupo de pterosaurios llamados tapejáridos. Estos pterosaurios son conocidos por sus cráneos con crestas de gran tamaño y provienen del período Cretácico temprano, que duró aproximadamente entre 145 y 100 millones de años.



En China se han encontrado algunos fósiles de tapejáridos bien conservados, pero no son tan completos como el fósil recientemente analizado, y la anatomía del pterosaurio no se ha descrito completamente. "Esta es la primera vez que tenemos el cráneo completo y el [cuerpo] completo", dice Victor Beccari, paleontólogo de la Escuela de Ciencia y Tecnología NOVA en Caparica, Portugal.

Cuando el equipo de Beccari recibió el fósil en 2016, ya había sido cortado en seis bloques. "Es una pena", dice Beccari, "pero lo utilizamos a nuestro favor". Los investigadores colocaron las piezas cortadas dentro de un escáner CT y luego usaron las exploraciones para producir un modelo tridimensional del esqueleto del pterosaurio que reveló partes aún enterradas dentro de la roca.


Los pterosaurios eran primos cercanos de los dinosaurios y coexistieron con ellos. Mientras que los dinosaurios se expandían por tierra, los pterosaurios regían los cielos. La coexistencia se dio desde el final del Triásico, hace más de 200 millones de años, hasta el final de Cretáceo, hace 66 millones de años, cuando ambos grupos se extinguieron tras una catástrofe global provocada por el impacto de un asteroide.


jueves, 9 de noviembre de 2023

ESTOS SON LOS PROTOTAXITES, HONGOS DE 8 METROS DE ALTURA QUE VIVIERON HACE 470 MILLONES DE AÑOS.

 Los prototaxites son hongos terrestres actualmente extintos que existieron en los períodos geológicos Silúrico y Devónico, hace aproximadamente 420 millones hasta hace 370 millones de años, cuando se extinguieron. Su longitud llegaba a alcanzar los 8 metros y crecían adoptando una forma parecida a la de una raíz, cilíndrica compuesta por tubos entrelazados de tan solo 50 micras (millonésimas de un metro, o milésimas de milímetro) de diámetro.



Está considerado como el organismo no animal más grande de aquella época, ya que las plantas alcanzaban tan solo 20 centímetros de altura. El prototaxites vivió en muchas partes del planeta. El verdadero hongo estaba bajo tierra en forma de filamentos, Es considerado como uno de los organismos más extraños que jamás hayan existido.




El paleontólogo canadiense John William Dawson publicó la primera investigación sobre los prototaxites en 1859, clasificándolo como una conífera; durante casi un siglo hubo un gran debate sobre qué es exactamente lo que era, argumentándose a través de sucesivas teorías que podía tratarse de un liquen o alguno de varios tipos de algas, hasta que en 1919 surgió su primera clasificación como hongo.




Ya en el año 2001, Francis Hueber, del National Museum of Natural History en Washington D. C., publicó sus estudios exponiendo que la falta de tejido vascular evidente lo descartaba de que fuera una planta, y lo clasificó como un hongo gigante, mas no fue hasta el año 2007 cuando Boyce, en un estudio de los isótopos de carbono C-12 y C-13 del hongo fósil, comparándolo con los de fósiles de plantas de la misma época, descubrió que eran muy diferentes entre ellos y que Prototaxites careció de fotosíntesis, ya que absorbía parte o todo su carbono de otras fuentes distintas a la atmósfera, por lo que no era una planta (solamente absorben el CO2 de la atmósfera), apoyando así los estudios de Hueber de que era un hongo gigante.





Es difícil ubicarlo en un grupo de hongos, pero se ha sugerido que pertenece a Ascomycota y que puede estar relacionado con Taphrinomycotina, especialmente el micelio y hifas de Prototaxites se asemejan a las encontradas en los hongos Neolecta de Taphrinomycotina, pero parecen ser más arcaicas y diferentes.